luis perronegro

luis perronegro

miércoles, 30 de agosto de 2017

creencias











Creo que los misterios de la belleza
se encierran en cajas muy pequeñas.
Creo que no hay nada más intenso
que ver como las nubes diseñan las formas de su techo
Creo que la felicidad es una experiencia
a la que cuesta mucho acostumbrarse. Esta llena de espejos.
Creo que el amor es una espada muy afilada
que siempre sangra, pero nos abre las puertas del alma.
Creo que hay muchas formas de vida
y que todas acaban en lo mismo, entre huesos
Creo que es mejor fumar a bocanadas grandes
que ser abstemio, ser ermitaño de deseos.
Creo sólo en los dioses que tienen sombras
y cuyos altares no están repletos de certezas.

He creído muchas cosas
para al final dejarme llevar por el viento.

domingo, 27 de agosto de 2017

la estupidez es una droga dura








Arranco las páginas azules
de los libros de la pereza,
escribo versos de fuego y agua,
cierro los altares de los bares
antes de que sus cadenas me muerdan
y me atrevo a pensar
despacio, masticando las palabras.

Entonces los dioses ya no tienen alas
las certezas son arena,
el mundo es un lugar salvaje
donde solo algunos reinan
y el resto corretean
por alfombras de tiempo inerte.

La estupidez es una droga dura
de la que siempre me estoy quitando,
devorando los espejos de aire,
construyendo utopías en el horizonte,
dibujándome huellas en los zapatos.

domingo, 20 de agosto de 2017

nacimos para amarnos

Nacimos para amarnos
como nacen los cielos para los pájaros,
con la eternidad de un libro abierto
con la cautela del verso
que quiere ser eterno.

se llenaron los silencios










Hay días donde llueven lágrimas,
donde el sonido del odio
rompe la ternura de las plazas.
Hay días donde el dolor abre las carnes,
donde el ánimo esta repleto de mareas
donde el terror es un escaparate.
Y en esos días,
cuando  dudas de las sombras de tus semejantes,
cuando crees que el mundo
es una rutina miserable de sangre,
salen los hombres y mujeres a las calles
y llenan todos los  silencios
con la fraternidad de los abrazos quietos.

martes, 15 de agosto de 2017

en la esquina de tus labios










Te miraba,
intensamente,
comiendo las lunas de tus ojos,
tatuando la saliva de tu piel
en hojas de otoño.

Te escuchaba,
con los oídos de mar
con las heridas de horizonte,
con las escarchas todavía recientes.

Te miraba,
intensamente,
esperando encontrar
el lugar donde nacen los sueños
y allí estaban
en la esquina de tus labios.

domingo, 13 de agosto de 2017

ahí

ahí,
a dos metros bajo tierra,
en el lugar preciso 
donde se escuchan los latidos del mundo,
ahí,
mientras las amapolas crecen
y saludamos a los gusanos
con el sombrero entre las piernas,
ahí,
nos damos cuenta
de los altos que son los muros
donde construimos los sueños.

el colibrí se cansa de mover las alas

El colibrí se cansa de mover sus alas,
no llega muy lejos,
prefiere zambullirse
en las corrientes cálidas del verano,
agotar los estertores del estío
en la punta de su lengua, 
esperando que el viento
le cambie el escenario.
El colibrí se cansa de mover sus alas
y es entonces
cuando abre sus plumas
y deja que el mundo 
abra sus carnes 
a un nuevo despertar
de sueños imprecisos.
El colibrí se cansa de mover las alas,
como si tuviera un niño
agarrado a las curvas de su pecho.