luis perronegro

luis perronegro

viernes, 28 de abril de 2017

primero de mayo

Los sueños posibles no vale la pena soñarlos:
Se cumplen solos.
Luchamos para conseguir lo imposible
para que todas las bocas tengan pan.

Marchamos con las manos llenas de azúcar
con la piel abarrotada de escarcha,
entre el dialecto de los cristales
y escupiendo pensamientos al suelo.

Caemos para que los que vengan detrás
no tengan que sufrir el mismo tropiezo
y luego encenderemos las hogueras
para cobijarnos del fuego.

Regresábamos a casa
con los bocas repletas de luz.
con los labios plenos de primavera
con la sonrisa de los abrazos fraternos.

Primero de mayo de 1886:
Su sangre nuestros derechos.
Les debemos parte del aire
que merece la pena respirarse.

lunes, 24 de abril de 2017

tener o no tener

Tengo mucho que decir y poco aire en mis pulmones
Tengo lo necesario para hacer batir las alas de mis sueños
Tengo todos los versos que asoman en tus labios
Tengo sed, tengo sal, tengo olas en la lengua
Tengo trozos de tus ojos en las nubes que pueblan el cielo.

Soy el desarrollo en carne viva, una fotografía de venas vacías
Soy la línea blanca que nunca has de pisar
Soy las emociones que erizan la piel, la cima de la parsimonia,
Soy el horizonte que se abate entre las manos
Soy el sueño y la almohada, el lento partir del parpadeo.

Tengo lo suficiente para construirme los palacios de invierno
Pero sin ti, no soy nada
Ni tan siquiera una piedra que se ahoga en un estanque.

martes, 18 de abril de 2017

si nos quitan las palabras

Si nos quitan las palabras
¿Qué tenemos?
Balas entre los dientes
aire en vez de labios
y la piel llena de escarcha.
Si nos quitan las palabras
nos roban parte del pensamiento,
atraviesan nuestras lenguas
y las llenan con su silencio.
Sin nos quitan las palabras
aprendamos a hablar de nuevo:
Pan, paz y casa,
esos serán nuestros primeros versos.

domingo, 16 de abril de 2017

si hubiera un barco que se hundiera.

Si hubiera un barco que se hundiera yo estaría ahí,
como lágrima quieta que quiere saber a rostro,
mientras la lluvia fina palpita tras la ventana
y el folio en blanco sangra versos sin cabeza.

Estaría ahí,
en el lugar donde nacen las causas perdidas,
en el paraíso de las revoluciones
que yacen en los estanques,
reivindicando mi derecho al delirio,
a una libertad sin hambre, a un hambre sin cadenas,
con los corazones secuestrados
por los bandidos que se asoman al tiempo,
soñando las utopías
que se duermen en los labios de los niños.

Si hubiera un barco que se hundiera yo estaría ahí,
robándole al mar sus olas
escuchando el silencio en sus caracolas
mientras la arena de la playa huye de mis dedos.

domingo, 9 de abril de 2017

aceras rotas















Rara vez se acuerda de sus despropósitos,
a lo sumo vomita los tatuajes
del día anterior,
cree haber encontrado una noche perpetua,
una noche siempre eterna,
donde la barra nunca duerme
y los labios no pierden sus flores.

Rara vez se acuerda de sí mismo,
se ha acostumbrado a no creerse,
no se fía de las arañas que suben por su piel
y no siente el ardor que perfora su esófago,
no se comprende cuando esta borracho
y no se reconoce cuando esta ebrio.
Vive sin espejo.

Rara vez quiso ganar algo,
que no le sirviera para estrujarles los segundos
al reloj ausente de la pared,
siente que se ha perdido ,
pero no se acuerda,
bebe un trago largo y coge aliento.
La noche es eterna.

Aceras rotas
en la oscuridad de una calle sin nombre.

sábado, 8 de abril de 2017

a veces el cielo se abre


A veces el cielo se abre
y no tienes paraguas,
ni nubes en las entrañas,
ni esponjas de miedos

y el cuerpo se moja
bajo las cornisas del tiempo,
tus cabellos se empapan de viento,
tu piel es un mar revuelto,
los charcos son espejos
y el reguero de agua
se muere en la punta de tus dedos

A veces el cielo se abre
y entras tú, con tus abrazos perfectos,
entonces la tierra se duerme
y comienzan a latir los sueños.

domingo, 2 de abril de 2017

tened presente el hambre

Tened presente el hambre: Recordad su pasado.

Tened presente la dictadura
de los labios rotos,
el hastió cuando se hace adulto
y crece como enredadera
en los escaparates de aire,
tened presente los lunes de asueto,
la ausencia de cicatrices en la ropa,
el trabajo que no calma el apetito
la gente sin techo
y las casas sin gente,
tened presente los silencios de duelo,
la monotonía del tiempo en las calles,
el sonido sordo de la pancarta
el aullido perpetuo de las palabras.
Tened presente,
que las matemáticas del hambre
abren los armarios
donde pernoctan los fusiles.

Homenaje a Miguel Hernández